La residencia oficial de la realeza española es, sin duda alguna, una visita obligada.
En el centro de la plaza principal de Madrid nos encontramos con la estatua de bronce del rei Felipe III, que data del siglo 1616.
El Retiro es un antiguo parque real que se abrió al público a finales del siglo XIX.
Contempla el templo egipcio del año 200 a.C. que fue trasladado a España para ser salvado antes de la construcción de la Presa de Asuán.
Esta increíble puerta monumental es lo más destacado de la Plaza de la Independencia.
El Valle de los Caídos es una basílica católica, una abadía y conjunto monumental.